Para lograr un entorno positivo. Los profesionales y la organización

 

 

a) Entender el buen cuidado desde el empoderamiento

 

 

Algunas claves

 

  • Tener claro que la atención centrada en la persona no es un modelo des-profesionalizado.

 

  • Buscar la calidad asistencial sin olvidar o restar importancia a los criterios técnicos de buena praxis basados en la evidencia científica.

 

  • Saber que la atención centrada en la persona va más allá de lograr una atención integral individualizada.

 

  • Asumir que los profesiones no deciden solos, como expertos, cómo han de ser las cosas.

 

  • Apostar por una relación de ayuda desde una relación “más horizontal” y donde la persona tiene un papel central y activo.

 

 

 

b) Reconocer y fortalecer las competencias clave

 

Los profesionales en este modelo de atención siguen desarrollando las distintas competencias relacionadas con la atención integral, pero ven intensificadas aquellas que tienen que ver con el desarrollo de la autodeterminación y capacitación de las personas.

 

 

Los gerocultores en la ACP

 

  • Son un recurso clave y por tanto son valorados, reforzados, cualificados y apoyados.

 

  • Se implican, se comprometen y velan por que la atención personalizada sea algo real.

 

  • Cada profesional presta atención al conjunto de personas que conviven en la unidad o servicio y además asume el papel de profesional de referencia de varias personas usuarias.

 

  • Mantienen una mayor polivalencia (apoyo en las distintas actividades cotidianas) dentro de su cualificación profesional porque la atención integral y continuada de las personas así lo requiere. La atención integral incluye tanto las tareas asistenciales clásicas (aseo, desplazamiento, alimentación, vestido, etc.) como otras relacionadas con el apoyo a la realización de las actividades de la vida diaria y el desarrollo de los proyectos vitales. Acompañar, ayudarle a preparar la comida, a hacer la compra, conversar, las tareas de ocio o el apoyo a las actividades estimulativas y de desarrollo personal son también parte de la vida diaria de las personas usuarias.

 

  • Toman decisiones sobre la organización del día a día, consultando y observando a las personas usuarias.

 

  • Son proactivos, cuando hay dificultades observan y proponen alternativas.

 

  • Consultan y están apoyados por el equipo técnico

 

 

 

 

Sus competencias como profesionales de referencia

 

1. Comunicación con las personas y generación de una relación de confianza

 

  • Reforzar vínculos emocionales y de confianza de la persona usuaria y de su familia.

 

  • Mostrarse cercano y disponible

 

  • Servir de apoyo y referente de seguridad a la persona y familia en la incorporación y adaptación inicial al centro o servicio.

 

  • Saber dar apoyo y aliento en los momentos de mayor vulnerabilidad y sufrimiento.

 

  • Facilitar la comunicación con la persona y la familia

 

 

2. Conocimiento de cada persona

 

  • Acercarse a la biografía y proyecto de vida de cada persona

 

  • Conocer las necesidades, lo que para la persona es importante y sus preferencias en relación a la atención.

 

  • Identificar las competencias de la persona, dando valor y reconocimiento a sus capacidades mantenidas.

 

  • Observar y descubrir en el día a día

 

  • Lo que le agrada y le genera bienestar y lo que le produce malestar.

 

  • Sus opciones para tomar decisiones y tener control sobre su vida cotidiana (capacidades, oportunidades y apoyos que precisa).

 

 

3. Búsqueda de recursos que generen capacidad y bienestar

 

  • Saber reconocer los recursos que tiene la propia persona y facilitar que la persona los identifique.

 

  • Encontrar y propiciar oportunidades de capacidad y bienestar (espacios, momentos, actividades…).

 

  • Identificar recursos externos a la persona (en las familias y amigos, en la comunidad…).

 

 

4. Apoyo al plan de atención y vida

 

  • Participar en su diseño, junto con los profesionales del equipo técnico.

 

  • Apoyar la participación e implicación de la persona usuaria en su propio plan.

 

  • Apoyar y velar por su desarrollo

 

  • Observar y aconsejar en su seguimiento

 

 

5. Coordinación, continuidad y coherencia de las intervenciones

 

  • Gestionar la información personal necesaria para su adecuada atención.

 

  • Comunicarse y coordinarse con la familia y allegados

 

  • Comunicarse y coordinarse con el resto de equipo profesional

 

  • Saber “pedir ayuda” al resto del equipo, identificando situaciones que pueden ser objeto de una atención especializada.

 

 

 

 

Los profesionales del equipo técnico en la ACP

 

  • Valoran a las personas y diseñan las intervenciones individuales

 

  • Prestan atención especializada en los casos que así se requiere

 

  • Diseñan y evaluan los programas de intervención

 

  • Asesoran y apoyan a los profesionales de atención directa en las situaciones más complejas o que requieren una valoración más especializada.

 

  • Forman a los gerocultores

 

  • Buscan nuevas ideas, diseñan nuevas intervenciones y actividades más significativas.

 

 

 

 

c) Sensibilizar. Despejar dudas y abordar las resistencias

 

 

Algunas claves

 

  • Informar sobre el modelo e identificar las resistencias. Dejar que se expresen y sean dialogadas. Ofrecer información y argumentos.

 

  • Concederse tiempo; el cambio de actitud no se logra en un día.

 

  • Desarrollar la empatía. Buscar acciones de sensibilización en las que los profesionales se pongan en el lugar de las personas usuarias y lleguen a comprender lo que la otra persona siente en ciertas situaciones.

 

  • Conocer experiencias de cambio reales y exitosas. Saber cómo lo han hecho y comprobar que el cambio es posible.

 

  • Destacar y hacer ver los beneficios del modelo. Hacer hincapié en los beneficios para los propios profesionales. No olvidar que el trabajo es un lugar de vida donde pasamos mucho tiempo.

 

 

 

d) Acompañar a los profesionales en los cambios

 

 

Algunas claves

 

Formar a los profesionales

 

  • Acoger y formar a los nuevos profesionales. Acompañar en la incorporación y facilitar un correcto desempeño de rol en coherencia al modelo de atención.

 

  • Programar formación continua desde un plan coherente que incluya no solo las competencias técnicas sino las relacionales y éticas.

 

  • Utilizar métodos o entrenamientos que permita transferir los aprendizajes a los escenarios cotidianos de cuidados (grabación en video de momentos cotidianos de actividad para la revisión individual posterior…).

 

  • Revisar las intervenciones cotidianas

 

  • Chequear el día a día

 

  • Implicar a los equipos en la búsqueda de alternativas para ir avanzando.

 

  • Analizar las situaciones complejas. Formarse en métodos deliberativos desde la ética para saber tomar decisiones prudentes.

 

  • Conocer las dificultades reales y manejar alternativas prudentes y posibles.

 

  • Mantener reuniones de equipo para analizar situaciones que generen dificultad o duda.. Consultar con otros profesionales

 

 

Dar apoyo emocional y revisar las dinámicas de los equipos

 

  • Desarrollar habilidades de gestión de emociones

 

  • Realizar sesiones de apoyo ante casos complejos y sucesos críticos (suicidios, accidentes graves).

 

  • Realizar coaching individual y grupal

 

  • Consultar con expertos y comités de ética los casos más complejos

 

 

 

e) Avanzar en una organización flexible al servicio de las personas

 

 

Las organizaciones al servicio de las personas

 

  • Organizan la vida diaria desde las necesidades y preferencias de las personas, no desde tareas asistenciales programadas.

 

  • Tienen horarios más flexibles

 

  • Proponen actividades agradables y las personas pueden elegir qué hacer.

 

  • Preguntan a las personas y les permiten elegir en su vida cotidiana.

 

  • No se "llenan" de normas. No piensan que la solución a los problemas está siempre en dictar una nueva norma.

 

  • Centros de capacidad reducida Diseños modulares con personal y funcionamiento propio (cartelera propia, horarios y actividades propios del módulo, etc.).

 

  • Permanencia del personal con los mismos usuarios

 

  • Estabilidad laboral, contratos indefinidos

 

  • Espacios donde opinan y participan las personas usuarias, las familias y no solo los profesionales.

 

  • Toman de decisiones priorizando las necesidades y derechos de las personas usuarias.

 

  • Tienen suficiente personal de atención directa

 

  • Ante los conflictos entre seguridad y deseos de la persona buscan pautas individualizadas basadas en consensos según cada situación.

 

  • Huyen de las normas genéricas que solo aseguran la seguridad a costa del bienestar subjetivo de las personas.

 

  • Tienen las normas precisas para una convivencia adecuada. No tienen un exceso normativo ni piensan que poner una norma sea siempre la solución a las dificultades.

 

  • Flexibilizan su organización diaria y facilitan que las personas elijan y decidan.

 

Se permite reproducir y utilizar estos contenidos siempre que se realice la correspondiente citación de la autoría (Teresa Martínez, 2013. En: www.acpgerontologia.com).

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